El tratamiento de trastornos psicológicos, emocionales y de la personalidad se enfoca en reducir el malestar, mejorar el funcionamiento diario y promover el bienestar. Estos trastornos, suelen requerir tratamientos prolongados que se centran en la mejora de relaciones interpersonales, la regulación emocional y la construcción de una identidad más saludable. Los principales enfoques de tratamiento, se adaptan según el tipo y la gravedad del trastorno. En muchos casos, la terapia se complementa con medicación o el apoyo psiquiátrico que se tengan ya indicados.

Terapia cognitivo-conductual (TCC): Ayuda a modificar pensamientos y comportamientos negativos. Es eficaz para trastornos como la ansiedad, depresión y algunos trastornos de la personalidad.

Terapia dialéctico-conductual (TDC): Diseñada para trastornos de personalidad, especialmente el límite, trabaja en la regulación emocional y habilidades interpersonales.

Terapia interpersonal: Mejora las relaciones y habilidades sociales, especialmente en personas con trastornos emocionales y del estado de ánimo.

Terapia basada en la atención plena (mindfulness): Ayuda a gestionar el estrés mediante la conexión con el presente. Beneficia trastornos de ansiedad, depresión y personalidad.

Terapia humanista: Explora experiencias subjetivas y patrones emocionales, como los generados por los vínculos de apego establecidos en la infancia, para comprender el origen de problemas de larga duración como los trastornos de personalidad.

La meta es promover cambios sostenibles en el comportamiento y la manera de afrontar la vida, fomentando un mayor equilibrio emocional y funcionalidad.

Para lograrlo te acompañaré de manera presencial y online, creando un espacio de seguridad y confianza en el que te puedas expresar y adquirir las herramientas más adecuadas a tus necesidades. Te espero.